Queridas seguidoras,
Llevo días queriendo escribir una entrada en el blog, pero claro, los deberes de la luna de miel me dejan poco tiempo disponible... :-)
Aunque me gustaría escribir una entrada correcta, meditada y densa, me temo que hoy todo irá en versión borrador: no tengo tiempo de nada más, y la salita junto a la recepción del hotel no es el lugar más adecuado para pararme a pensar y a compartir mis inquietudes más profundas... Pero siento que tengo que dejar unas palabras. Me lo debo a mí, y os lo debo a vosotras.
Que por cierto, gracias, gracias, gracias por todos vuestros comentarios y por acordaros de mí en mi día B. Y ahora... ¿por dónde empiezo?
Ufff.... creo que este es un post un poquito difícil... La verdad, he tenido unos días confusos después de la boda. No ha sido todo realmente como pensaba. Y no sé si en este lugar tan concurrido y con el poco tiempo disponible, podré ordenar adecuadamente mis ideas.
Pero va, voy a dejar que las palabras salgan de mí aunque sea sin orden...
Empecemos por el principio, por la frase más oída en la vida de una mujer ¿ha sido el día de mi boda el más feliz de mi vida, el día de mis sueños?
No.
No, no ha sido así. Me adelanto un poco y he de decir que el día me ha decepcionado un poco. Pero ahora mismo, hoy por hoy, lo digo sin acritud; con un poquito de pena, pero ya superada del día post-boda en el que me dije: ¿y esto ha sido todo?
El día de mi boda se ha pasado rapidísimo. En esto coincido con todas las novias del mundo, creo yo. Pero aparte de eso... aunque el día empezó perfecto, yo con un estado de ánimo positivo, feliz y risueño (¿os podéis creer que realmente llegó el día Y ME DABA IGUAL el tiempo que hiciera? me daba igual la lluvia, el frío, el viento...). Pero cuando llegué a la iglesia... no sé cómo explicarlo pero creo que desconecté de mi. Me pareció vivir el día como desde fuera, como si no fuera realmente la protagonista. Me había trabajado tanto las lecturas y las canciones de la iglesia que, el leerlas o escucharlas, no me sobrecogió. No hubo factor sorpresa, sabía lo que iba a venir.
La gente me felicitó por todo, me dijeron que fue una ceremonia preciosa y una boda posterior muy divertida pero ¿sabéis qué? Yo no lo sentí de la misma forma. Para mí fue lo esperable. Y me da un poquito de pena decir que no tuve ningún "momento trascendental" en mi boda. Sí, en un momento dado me emocioné, y sé que me sentí feliz porque me veo en las fotos y estoy radiante (yo, que me considero cero fotogénica, ese día me daba igual posar).
Es una sensación extraña: es como si mi mente y mi cuerpo fueran por dos lados distintos. Mi mente se había empeñado en sentir una y mil cosas, estaba presionada de antemano por experimentar maravillosos sentimientos de gloria como había leído en los blogs y en los foros; y no, esos momentos no llegaron. Pero mi cuerpo, de alguna forma ajeno a los delirios de mi mente, sí que se manifestaba de forma positiva. Salgo guapísima en las fotos (no es falsa modestia, es que es cierto; si no tengo pudor en reconocer que no sentí lo que esperaba, tampoco he de tenerlo en admitir este tipo de cosas), todo el mundo me dijo que parecía super feliz y que mi novio y yo estábamos super enamorados...
Realmente es algo extraño. Pero es cierto que el día de mi boda me decepcionó en parte. Y una gran parte de culpa también la tuvo el catering encargado de servir el evento. Yo, que soy un persona perfeccionista, y que miro más las cosas que salen mal que las que salen bien (una parte de mi carácter que había obviado hasta este momento y con la que tendría que haber hecho un trabajo previo), me sentí totalmente defraudada por el servicio y la comida que nos dieron. De calidad inferior a la que yo había esperado, y desde luego alejado de la prueba del menú. He de decir que cuando coges un menú más caro de lo normal porque quieres que todo tenga ese grado de sofisticación que buscas, y luego te encuentras algo que no está mal pero que tampoco llama la atención, te sientes en parte decepcionada.
Otra cosa que me resultó un poco agobiante fue el momento de repartir los detalles de boda y recibir las felicitaciones. La verdad es que estuvo todo un poco desorganizado, también porque los del catering no se ocuparon de llevarlo todo correctamente. Estuve como una hora sin parar de hacer cosas, y sintiendo que las cosas se me iban de las manos...
Y bueno... llegó la barra libre, me divertí, vi a la gente pasarlo genial (cierto, creo que mi boda sólo fue un poco insulsa para mí, todo el mundo me dijo que estuvo llena de sentimientos y detalles) y me animé un poco.
Pero acabó el día y me dio pena... de que todo hubiera pasado, de no haberlo disfrutado lo suficiente. Pensaba que sentiría alivio cuando pasara la boda, y pensé que esperaría ilusionadísima la luna de miel.
Y sentí penita del final, algo que no esperaba. Y sentí que me estaba centrando en los aspectos que menos me gustaban, que mi carácter perfeccionista me estaba aguando un poco la fiesta. Y también sentí que eso que te dicen de "disfruta el día todo lo que puedas" es un consejo bienintencionado pero difícil de cumplir. ¿Alguien sabe, acaso, como "se disfruta"?
Desde luego, para disfrutar una tiene que dejar su mente tranquila, no obcecarse en disfrutar, fluir simplemente. Y para una mente analítica como la mía, es difícil.
Vaya... menudo rollo que os he plantado aquí de repente. Y sin fotos ni nada para digerirlo mejor XD Aprovecho para decir que, en principio, no voy a colgar ninguna foto del día de mi boda en el blog, y siento si os decepciono. Pero desde mi punto de vista, estoy abriendo tanto mi corazón, he dicho tantas cosas, que no podría pensar que alguien que me conociera de lejos supiera tanto de mí.
Así que, en resumen... mi boda fue muy bonita, me encanta ver las fotos de ese día, pero tuve varias decepciones, y creo sinceramente que no la disfruté como hubiera debido. Han tenido que pasar unos días para que esa afirmación no me duela tanto. Y he tenido que relativizar, y centrarme en lo positivo: mi atuendo era perfecto, mi gente se lo pasó genial, y mi marido y yo hemos apostado por una vida juntos. Y el resto... son cosas que pasan en la vida.
Y la boda me ha permitido conocerme a mí misma. Conocer partes de mi carácter que no había considerado. Por eso he titulado este post "la boda y mi forma de ser". Y sí, presumo que este blog se autodestruirá o se reeditará dentro de muy poco, porque hoy sólo quiero vaciar mis sentimientos...
A las que os casáis dentro de poco: no os agobiéis con disfrutar, es algo que cuanto más lo piensas y más lo intentas menos lo consigues. Pensad que si sois exigentes y perfeccionistas, ese día lo seréis también (no cambia una porque esté preciosa y vestida de blanco); y no os voy a decir que os centréis en lo positivo y no en lo negativo porque es algo que nadie puede decirte, una tiene que trabajarlo.
Acabo este post recordando que, aunque en mi boda no haya ningún momento trascendental para rememorar el resto de mi vida, sí que he tenido más de uno en los días de antes, mientras preparaba mi boda. Y me digo que... que la boda ha sido un día, hiper acelerado, pero todos los preparativos me han durado meses, y he vivido recuerdos tan bellos en algunos momentos que me han hecho llorar. Llorar profundamente, como no lloré en la boda. Pero sí a causa de la boda.
Y eso hoy me consuela y me hace pensar que todo este camino ha merecido la pena: el blog, los preparativos, el compartir experiencias de novia, el sentirme una novia... Y a la vez, todo esto me hace ver que es natural que sienta un poquito de pena al ver que el día ha pasado y que no ha respondido a mis expectativas: soy humana, y hay sentimientos contra los que es mejor no luchar y aceptarlos simplemente.
Un beso grandísimo a todas las que hayáis conseguido llegar al final de esta entrada.
Hasta pronto.
Ooooh...
ResponderEliminarMe has dejado de una pieza...
ResponderEliminarAdmiro que aceptes las cosas como son pero el no haber tenido nada especial, ese ansiado primer baile, esa noche de bodas, esa sorpresa de tus primos lejanos, esa cancion dedicada por tu reciente marido, esas lagrimas de tu amiga al entregarla el ramo.... nada de nada? Al menos conseguiste que fuera uan boda para recordar.
http://partefav.blogspot.com
Fútil completamente, lo más triste es que en ningún momento hablás de como se sintió la persona que te casaste, parece que te casaste contigo misma (o no), tenés un mambo contramano en tu cabeza considerable. Felicidades!
ResponderEliminarTe llevo leyendo desde que empezaste a escribir, aunque nunca te habia escrito, nos casamos con cinco meses de diferencia y me sentia super identificada contigo, con cada cosa que hacias, yo tambien he pasado momentos dificiles con mi novio, mi familia, agobios, pero veia que al final te sobreponias de todo, igual que me pasa a mi y me animaba. Me encanta todo lo que has elegido, aunque no coincida (cada una tiene sus gustos), el mimo que has puesto y parecia que me estaba leyendo a mi misma, y, al leerte hoy, uf... me has dejado super triste xq, como puede haberte pasado eso? Espero que te sobrepongas como siempre y nos mandes un mensaje de esperanza antes de autodestruir el blog o modificarlo. Te mando muchas fuerzas, aunque no me conozcas, porque yo sí siento que te he conocido un poco en estos meses. Un beso, Ana
ResponderEliminarImagino que ponemos tantas ilusiones y expectativas en el día B, hemos soñado durante los meses previos a la boda, como será todo, hemos leído tanto sobre lo que debes sentir, que al final la realidad no cumple con las expectativas soñadas, estas esperando las mariposas, una señal que diga que ese es el momento clave...que si no lo experimentas se sientes defraudada contigo misma.
ResponderEliminarDisfruta de tu luna de miel, la felicidad está en las cosas pequeñas, cada una tiene que buscar la suya propia y no siempre lo maravilloso para otros, lo tiene que ser necesariamente para tí.
Este blog, me ha ayudado mucho y aunque me gustaría conocer más detalles de tu boda, respeto tu decisión de no publicar fotos, sin embargo me gustaría que no borraras el blog ni lo modifiques, con tus experiencias y tu valentia al contarlas, nos has ayudado a muchas.
Un besazo gordo.
Nena siento que tu boda no haya sido como tú esperabas. Sí que es cierto que cuando llevas tanto tiempo preparando una boda, no te sorprenden por ejemplo las lecturas o la música porque la has elegido tú y sabes como van a ir las cosas.
ResponderEliminarPero yo también me he quedado de una pieza al leerte, ¿no te jugarían los nervios una mala pasada?
¿No sentiste un momento especial al vestirte de novia con las personas que más quieres? Me imagino que lo compartirías con tu madre y tus hermanas.
¿Cuándo entraste en la iglesia y viste a tu futuro marido esperándote?
Yo sabía la canción que iba a sonar y aunque ya la tenía más que escuchada sí que sentí una emoción, no para llorar sino para sonreír.
Pero cada una tiene su experiencia y lo vive de una forma, no hay ninguna manera de vivir las cosas. Nadie tiene que decirte lo que tienes que sentir ese día ni ningún otro.
También creo que te afectó lo del catering y a lo mejor ahora lo tienes demasiado reciente para verlo con total claridad y el tiempo te de otra perspectiva de tu boda.
Gracias por compartirlo con nosotras, y ah!!! Quédate con tu boda sí que fue maravillosa, llena de detalles y que la gente se quedó encantada :D Ya verás como tú también lo verás de otra forma.
Ahora desconecta y a pasarlo bien :D
Mil besos guapetona!!!!
www.ideasparatuboda.blospot.com
Estaba deseando leer este Blog, no tengo ordenador y ando algo liada, he de decir que no me ha sorprendido mucho como has hablado de tu Boda, sabemos que eres perfeccionista, y todo lo tienes muy reciente, pero cuando algo no sale como esperamos empaña los bonitos acontecimientos que también surgen.
ResponderEliminarDisfrutaste el momento de la barra libre, y seguro que todo lo demás, ahora tu luna de miel, has sacado un rato para comentarnos como ha ido.
Yo te quiero dar las gracias por la sinceridad a la hora de hablar de los días previos, en y después de la boda.
Estoy segura que cuando te veas con tu ya marido en vuestra casa y veáis las fotos y recuerdes los momentos con tus amigas, madre, hermana...verás las cosas de otra forma.
Un besazo enorme, y enhorabuena!ya estás casada!
No autodestruyas este Blog!seguro que hay mucha gente apunto de casarse que le gustará leer experiencias como las tuyas y se sentirán identificadas, ahora puedes contar qué tal los primeros días de casados!jejej
Un besazooo
Siento que al terminar todo te hayas sentido asi, pero creo que se debe a que lo tienes todo muy reciente y te estas centrando en lo negativo.
ResponderEliminarEstoy segura de que fue una boda preciosa y de que poco a poco te iras centrando en aquello que disfrutaste y pasara a segundo plano lo que te decepciono en parte.
Enhorabuena por tu matrimonio y disfruta mucho de tu luna de miel! Lo bueno no ha hacho más que empezar!
Me parece tremendamente valiente por tu parte que seas capaz de publicar un post como el de hoy, cuando se supone que el día de tu boda "debe ser el más feliz de tu vida", y similares.
ResponderEliminarEs un día -generalmente- idealizado, y creo que muchas de las publicaciones "bodiles" (revistas o blogs) contribuyen a ello... Es como lo que nos venden de pequeñas del "príncipe azul".
Puedo decir que en mi caso fue el día más intenso emocionalmente (en positivo) que he vivido hasta el momento, y que a pesar de las cosas que no salieron como yo había pensado (curiosamente también tuvieron que ver con el cátering), fue realmente inolvidable, con momentos sorpresa y momentos emotivos.
El día de mi boda NO fue el más feliz de mi vida (todavía intento ponerle un calificativo, si es que ello es posible), al igual que nuestra Luna de Miel tampoco ha sido el viaje más "romántico" del que hemos disfrutado.
Yo no borraría ni una sola de las entradas de este blog, sobre todo la de hoy. Hay que ser consciente de que una boda es -"solamente"- la celebración de la unión de dos personas, y tenemos que sentirnos bien con esa celebración, pero lo bueno -ya verás- viene después.
Espero y deseo que el tiempo calme tus emociones y seas capaz de encontrar el oro entre todo ese barro.
Me pregunto si has hablado del tema con tu marido... ¿cómo lo vivió él? Me encantaría saberlo...
Te espero en tu rinconcito ;-)
Un beso enoooorme,
M.
He seguido tu blog prácticamente desde el principio y, aunque ya había pasado mi día "B" he seguido pasando por aquí porque me encanta la manera que tienes de "desmitificar" las bodas y de centrarte en lo sustancial.
ResponderEliminarEs curioso porque varias amigas mías me habían hablado de lo que tú comentas: de vivir la boda desde fuera, como si tu cuerpo y mente se desligaran, y de que el día se pasa volando. Yo pensaba que me pasaría, porque suelo ponerme nerviosa, pero la verdad es que no fue así y, por suerte, me abstraje de los imprevistos y las preocupaciones y disfruté de todo el día.
En cualquier caso, lo que tienes que pensar es que, como has reflexionado aquí mismo en muchas ocasiones, la boda es sólo el principio, el principio de una vida en común de una manera diferente a cómo lo era antes. Y disfrutar de esa nueva vida, de todos los años que os quedan por delante, es lo importante.
Mucha suerte y disfruta de la luna de miel!!
Un beso,
Marta.
Yo solo te voy a decir una cosa,porque creo que te puede ayudar.
ResponderEliminarEn el futuro cuando pienses en tu boda no lo verás como "el dia de la boda", sino como un conjunto, unos meses, una etapa especial. El dia que te vestiste de novia por primera vez, cuando elegiste tu ramo, los momentos de complicidad con tu madre preparando cosas, los "paréntesis bodiles" con tu chico...
Cuando yo ahora, 1 año y medio después, pienso en mi boda no tengo la foto fija de un dia,sino la película evolutiva de unos meses.
Ya veras como si... Un beso muy fuerte!:-)
Hola guapa! No había visto esta entrada, siento comentar tan tarde. La verdad es que solo puedo agradecerte tanta sinceridad en tus palabras, yo siempre digo que hay un lado oscuro en las bodas que nadie nos cuenta, y que parece que lo dejan para que cada pareja descubra los suyos! Sé esa sensación que comentas, que parece que no eres tú la que vive las cosas, que ves lo que pasa pero que no te parece ser tu la que las está viviendo, y llegas a casa o al hotel e intentas recordar palabras que has dicho, o risas y no las encuentras en tu mente, se esfumaron. Quizás será cierto que no las viviste tú, aún siendo tu cuerpo el que estaba ahí...no sé si me explico, es frustrante, me pasa a veces y no entiendo el motivo.
ResponderEliminarMe caso en unas semanas, ya lo sabes, no sé si todo saldrá como quiero y pienso, o si me veré guapa, o si mis invitados lo pasarán bien o no, la verdad no pienso mucho en ello, me limito a disfrutar de esta preparación, a ver como mis amigas cercanas sacan esas sonrisillas al hablar de mi día, y mirar a mi futuro marido y sentir que es con él con el que quiero estar el resto de mi vida...lo demás...ya te lo contaré cuando pase, jejej!! muchos besitosssssss y disfruta de este nuevo estado, que como bien dices, es lo que importa ¡Eres una mujer casada!
Hola guapa! No había visto esta entrada, siento comentar tan tarde. La verdad es que solo puedo agradecerte tanta sinceridad en tus palabras, yo siempre digo que hay un lado oscuro en las bodas que nadie nos cuenta, y que parece que lo dejan para que cada pareja descubra los suyos! Sé esa sensación que comentas, que parece que no eres tú la que vive las cosas, que ves lo que pasa pero que no te parece ser tu la que las está viviendo, y llegas a casa o al hotel e intentas recordar palabras que has dicho, o risas y no las encuentras en tu mente, se esfumaron. Quizás será cierto que no las viviste tú, aún siendo tu cuerpo el que estaba ahí...no sé si me explico, es frustrante, me pasa a veces y no entiendo el motivo.
ResponderEliminarMe caso en unas semanas, ya lo sabes, no sé si todo saldrá como quiero y pienso, o si me veré guapa, o si mis invitados lo pasarán bien o no, la verdad no pienso mucho en ello, me limito a disfrutar de esta preparación, a ver como mis amigas cercanas sacan esas sonrisillas al hablar de mi día, y mirar a mi futuro marido y sentir que es con él con el que quiero estar el resto de mi vida...lo demás...ya te lo contaré cuando pase, jejej!! muchos besitosssssss y disfruta de este nuevo estado, que como bien dices, es lo que importa ¡Eres una mujer casada!
Jolín, guapa, y eso que te advertí! Quizá sea más común de lo que parece... El problema son las expectativas, creo. Yo me volvería a casar para enterarme de todo! En fin, que enhorabuenísima! He estado desconectadilla pero ya vuelvo y veo que tengo lectura atrasada por aquí! ;)
ResponderEliminarHola, he encontrado este blog porque estaba buscando consejos para mi boda, ya que me caso en mes y medio. Todavía me quedan muchas cosas por hacer y estoy bastante nerviosa así que me horroriza pensar en como me sentiré una semana antes. Sin embargo tu post me ha animado, porque estoy harta de escuchar que "es el mejor día de tu vida", o "todo fue perfecto". Es como cuando te dicen "yo lloré cuando me puse mi vestido" y te agobias pensando "y si yo no lloro, y si no encuentro MI vestido??". A mi me ha relajado leer tu post porque me ha parecido realista y salido directamente del corazón.Y me ayuda a pensar que como en la vida, lo importante es el camino y no tanto el llegar. Y que nunca puedes planear que un día sea el más bonito de tu vida, simplemente ocurre. Yo espero disfrutar de un bonito día con mi pareja y la gente que nos quiere, nada más. Muchas gracias
ResponderEliminarAmelie, tú misma te estás diciendo todo lo que tienes que saber. Qué mensaje tan sabio y tan bonito, me ha encantado. Mi consejo sería precisamente ese, que no te empeñes ni pienses en disfrutar (lo harás, de un modo u otro), que no te agobies que no es una situación de vida o muerte, y que al día siguiente te levantas y te quedan las sensaciones no del día anterior sino de los últimos meses. Eso y... tu marido. Mi boda no fue el mejor día de mi vida, no lloré ni un segundo; pero fue bonita, y hoy por hoy vivo bastante feliz con mi marido, me siento muy en paz :) ¡¡Que te vaya genial este mes y medio antes de tu boda!! Déjanos saber cómo ha ido ;) un beso!
ResponderEliminarA mi me sucedió exactamente lo mismo, me casé hace poco y fue como si no hubiera estado ahí, como si hubiera despertado de un sueño al día siguiente y decir, ¡ya pasó!, días previos pasaron muchas cosas desafortunadas,una tía se enfermo y todos los hermanos de mi madre fueron a visitarla, estuvieron una semana con ella y regresaron al día siguiente de mi boda, lo cual no se me hizo justo, ya que hicimos la boda en el lugar donde naci para que no faltara la familia, planeamos una boda para 350 personas no queríamos dejar a nadie afuera de este momento, porque no faltaba quien hasta nos decía ¡me invitas! y sin embargo lo hicimos y quizá a quienes no invitamos quizá si hubieran estado ahí, fue una pena que solo estuvieran poco mas del 50% de los invitados, casi todos los proveedores nos quedaron mal, pero al final nos entregaron los recuerdos,según contratamos el mejor de los banquetes de la ciudad y los meseros nos robaron bebidas, y al parecer algunas cosas para la fiesta, nos quedamos prácticamente solos con todo el paquete, si no fuera por mi cuñada y mi hermano que nos apoyaron y al final unos primos, todo hubiera sido un desastre, todo el peso de recordar toodo lo que había que hacer cayo sobre mi, lo cual me sobrepaso, y claro que algunas cosas se me olvidaron, y todo para que el gran día llegara tarde a la iglesia por esa causa (lo cual me frustro), en la iglesia nos hicieron dar vueltas hasta el ultimo día con los papeles, llegue y nos casaron pero ya como algo apresurado y casi casi nos corrio el padre al terminar, porque seguian unos Xv años, creo que por toda la presión que tenía me bloquee por completo y no tuve ningún sentimiento en mi boda, mi novio se sorprendio de mi tranquilidad (cosa rara en mi) o por lo menos ni lo recuerdo lo que sentí, en todas las fotos salgo sonriendo, lloramos en nuestro baile de boda y eso porque mi novio empezó, como en una especie de mezcla de desahogo, emoción, quien sabe, me paso el tiempo como agua, claro que algunos días previos antes si tengo buenos recuerdos, como cuando me probaba el vestido,fue mas especial un día antes la boda del civil, que fue demasiado sencilla,solo nosotros, mis padre y nuestros testigos, pero en realidad todo los sentimientos que te dicen creo que por el nervio no existen, nos vemos felices y enamorados porque realmente así estamos, pero en el momento estaba ida, pero bueno también he llorado por esta situación incluso el me ha planteado una renovación de votos, quizá lo pensemos pero con solo las personas importantes que sabemos que no nos fallaran, algo mas pequeño, para poder contratar un organizador y disfrutar realmente ese día, sin preocupaciones, pero puede que dentro de unos años de casados, para fesjetar como una especie de aniversario, ya veremos. Antes de leer tu blog, pensé que era la única y me sentía algo triste, pero veo que a muchos nos pasa. Es mejor enfocarse en nuestro matrimonio y el gran paso que dimos, lo demás ya es material.
ResponderEliminarEste post me ha dejado muy pensativa. Nunca habia comentado, pero me han llegado estas palabras.
ResponderEliminarMi novio y yo hemos decidido casarnos, y aunque faltan varios meses, como buena novia organizadora he estado leyendo y leyendo post, encantándome con maravillosas ideas, escribiendo y dibujando todo aquello que me parece imprescindible tener en mi boda, soñando con los momentos especiales que creo viviré cuando llegue el día: como cuando me enfunde en ese vestido que tengo perfectamente imaginado, o cuando camine por el pasillo evitando llorar pero sin poder contenerme... y de pronto leo este post, y me haces caer en cuenta que puede ser que esa emoción que espero con ansias, se vea opacada por la tensión de querer todo perfecto, o por la rapidez con que se va el día que tanta planificación exigió. Pero a la vez, siento que he recibido la solución al problema, y es eso que has dicho sobre "disfrutar". No forzar nada, simplemente hacerlo natural. Planificar todas las escenas, pero cuando la película se estrene, relajadamente verla y sentirme la más afortunada de las protagonistas.
Muchas gracias por exponer tan sinceramente tu propia situación que de mucho sirve para todas nosotras que estamos en el mismo camino.
(Lo sé, este post es ya antiguo, pero he querido manifestarme de todas formas, aunque quizas nadie lea)
Lola,
ResponderEliminar¡Cómo te entiendo...! Son tantas las veces que repasamos los momentos clave de nuestra boda en la cabeza, que si ese día tenemos un sentimiento diferente, nos decimos "oh, algo va mal", y empezamos a decepcionarnos.
Tú misma lo has dicho: lo mejor ese día es levantarse sin expectativas, y esperar con naturalidad que todo vaya surgiendo. De todas formas, es que incluso eso es complicado, porque a veces tu cuerpo te sorprende con sensaciones que no esperabas, para bien o para mal.
Así que a mi modo de ver, lo importante es ser consciente de cada momento que va surgiendo y no juzgarte. Ahora estás en las nubes pensando en tu día, pues muy bien, sigue así, ¡es lo que toca! Y el día de la boda, esperar a recibir el cariño de los que te rodean, sin más pretensiones.
Un beso!
Hola! Acabo de leer este post y coincido exactamente con todos tus sentimientos.De verdad, con todos! El dia de mi boda fue exactamente igual. Yo también soy muy perfeccionista y quizá fue eso lo que me impidió disfrutar del día como me hubiera gustado. Y no es que no lo disfrutara en absoluto, que si lo hice, pero como tu bien dices, es como si lo hubiera vivido en tercera persona.
ResponderEliminarNosotros habiamos alquilado una finca maravillosa, organizado el banquete en un jardín idílico, cuidado la decoración, elegido toda la musica, etc. Ese dia amaneció soleado y teniamos todos los ingredientes para que fuera EL DIA PERFECTO. Pero no lo fue, por varios motivos: hacía muchísimo calor, la limpieza de la finca dejo mucho que desear, el catering fue directamente desastroso (como tu dices nada parecido a lo que habiamos probado en la prueba...) etc. y aunque todo el mundo la recuerda como una boda emotiva, original, cercana...en ese dia yo me centre en esos problemas más de lo que hubiera debido y quizá eso y los nervios hicieron que no fura exactamente el DIA PERFECTO que habia imaginado.
Ya han pasado varios meses de la boda, y ahora viendo las fotos y videos una y otra vez no paro de decirme: pero mira! Si fue todo perfecto! Por qué no me sentiría así en su día? Pues porque no, y porque es normal que teniendo unas expectativas tan altas (en parte creadas a raíz de leer blogs y blogs en los que las bodas son siempre perfectas) al final TODAS no se cumplan. He de decir que el dia de mi boda fue un dia muy feliz pero no el DIA MAS FELIZ DE MI VIDA. Y es más hoy por hoy, no sabría elegir cual has sido el dia más feliz de mi vida, simplemente, prefiero quedarme con la felicidad que siento cada día al compartir mi vida con la persona que quiero.