Me encanta este halo de romanticismo, tradición, aroma vintage y cierto gusto por los pequeños detalles que transmiten. Hasta ahora, había pensando incorporarlos en mis invitaciones (en forma de puntilla), en mi libro de firmas (pues sí, haciendo dibujitos y cuadrados dentro de la páginas), quizás en los meseros y... viendo el blog de diariodelanovia se me ha ocurrido que por qué no incorporarlos en las mesas del restaurante: en la mesa del libro de firmas (sí, el libro de firmas tiene que tener su mesa propia, aunque se pase de mano en mano si la gente no se anima a firmar), la de los dulces, o incluso en la nuestra, la de los novios.
Además, me parecen tan bonitos que los pondría en casa. Quedarían perfectos para iluminar una cena con amigos o una velada romántica, ¿no creéis?
Su fabricación es muy sencilla: sólo necesitas tarros de tamaños varios, tapetes de ganchillo (recicla los de tu madre o tu abuela que ya no ponen sobre el sofá), cinta de rafia o raso, y spray adhesivo para pegar el ganchillo y las cintas. Las instrucciones y más fotos aquí. (Cortesía de diariodelanovia)
¿Verdad que son preciosos e ideales para nuestro gran día...?
q monada para el baño!!!
ResponderEliminarbss
NOS ENCANTA LA IDEA!ese toque romantico es genial..nos gusta para todo, miles de combinaciones..felicidades por tu boda!!
ResponderEliminarPM